A mediados del siglo XV, cuando España era azotada por el hambre, al encarecerse el comercio entre Europa y las Indias orientales como consecuencia de la caída del Imperio Romano de Oriente y al ascensión al poder de los turcos otomanos (1453), la reina Isabel La Católica optó por confiar en el navegante Cristóbal Colón y financiarlo para que conquistara tierras y riquezas en las tierras donde llegara para sacar la monarquía de las deudas, el hambre y la descomposición que la agobiaba. Así fue que los cuatros viajes del cartógrafo almirante y luego gobernador general de las «Indias Occidentales» al servicio de la corona de Castilla vino a solucionar la crisis financiera de España.
El territorio que devendría en Venezuela era un paraíso: navegación segura y periódica para llevar a la Península oro, frutos, alimentos (maíz, cacao, papas, tabaco). Estos se convirtieron también en poder para la corona, en engrosamiento del erario de la monarquía y sobre todo acabó con la hambruna.
Durante el coloniaje “Venezuela era un paraíso” saqueado y expoliado. Territorio para taladrar las estructuras administrativas de España, para avasallar a los pueblos originarios, para mancillar la población importada del Africana paraíso para la dominación, de los hombres y mujeres indígenas para la sumisión del mestizaje que nacía, mientras los barcos cargaban para el continente europeo de ese paraíso que era Venezuela todas las riquezas y fortalecían el comercio de la Península.
Llegó Simón Bolívar y el paraíso que era Venezuela cambió. Sin embargo los señores encomenderos (dueños de las tierras conquistadas, invadidas por La Corona española) se fueron mimetizando pero continuaron siendo los dueños de las tierras. El latifundio fue un fenómeno de la hegemonía de los blancos españoles: los pueblos originarios arrinconados y la población africana obligada a trabajar para las arcas del invasor. “Venezuela era un paraìso”.
En 1914 (31 de julio 1914) el primer pozo productor de petróleo en territorio venezolano dio inicio a una nueva forma de despojo, injerencia y expoliación. Llegaron los yanquis y los negocios se realizaba ahora con los otrora «señores encomenderos” (peninsulares- monárquicos). “Venezuela seguía siendo un paraíso”.
La historia de Venezuela siguió siendo la historia de la exclusión. El pueblo no participaba de los beneficios de la producción del hidrocarburo, ya que las riquezas engrosaban el erario del norte y lo que quedaba no era para el pueblo sino para la oligarquía criolla en complicidad con los gobiernos de turno. “Venezuela era un paraíso”.
“Venezuela siguió siendo un paraíso” para acoger a los desplazados que se oponían a Franco, para los que venían diezmados de la segunda guerra mundial, los que huían de Mussolini y Hitler.
En 1958, luego del derrocamiento del dictador Pérez Jiménez, llegó la Democracia representativa y la alternancia de los partidos Acción Democrática y Copei. “Venezuela era un paraíso” de exclusión de las mayoría, de pobreza y el festín de la riqueza era para la minoría privilegiada. Surgieron las familias de «abolengo” descendientes lejanos de los conquistados que habían acumulado poder y riqueza a espaldas del pueblo desde el siglo XV. A éstas se sumaban los nuevos ricos producto de las políticas neoliberales del puntofijismo, los extranjeros españoles que volvían atraídos por las facilidades de enriquecerse con la anuencia de adecos y copeyanos que los hacían sus testaferros. Legaban incluso al poder para saquear el erario público, venían por «los negocios » con los gobiernos apátridas adeco-copeyanos. Esos son los mismos que ahora en oposición se hacen llamar la MUD y que se han convertido en vándalos, asesinos rehenes de la ambición y la locura por el poder y que quieren llevar a la patria de Bolívar a una guerra civil y a una intervención de EEUU.
Ante tanta malversación de fondos, negocios sucios que empobrecían al pueblo, hambre, desigualdad social, exclusión, abandono del campo, sometimiento de la clase trabajadora, represión, criminalización de la protesta, surge en la historia venezolana la fecha del 4 de febrero. Ese fracaso militar (no lograron derrocar al Carlos Andrés Pérez (CAP) se convirtió posteriormente en éxito político cuando Chávez Frías llega al poder y con él se dé inicio a las transformaciones sociales para una patria libre y soberana. “Venezuela dejó de ser un paraíso”.
Venezuela dejó de ser un paraíso porque:
1) La Constitución de la República Bolivariana reza que el poder originario reside en el pueblo (ese pueblo excluido y marginado desde el siglo XV.
2) Porque ese pueblo es beneficiario de la Gran Misión Vivienda Venezuela que les ofrece techo a los desposeídos.
3) Porque los indígenas y afrodescendientes han sido reconocidos y respetado sus derechos para participar en un Estado de justicia y de derecho.
4) Porque la Misión Milagros vino a salvar la salud visual de los y las venezolanas de recursos económicos limitados.
5) Porque la Misión Barrio Adentro lleva atención primaria de salud a los Barrios venezolanos donde habitan las familias de escasos recursos.
6) Porque hay un cardiológico infantil que salva vidas a niños y niñas.
7) Porque hay misiones educativas (Robinson, Ribas, Sucre) que son exponentes de la gratuidad de la enseñanza en todos los niveles y modalidades.
8) Porque los adultos mayores tienen una pensión mensual que ni siquiera la crisis del petróleo, ni las guarimbas han podido eliminar.
9) Porque los adultos mayores no pagan el transporte público.
Podría enumerar aquí muchas Misiones y políticas del Estado Bolivariano que han venido a saldar la deuda social heredada de los gobiernos de derecha. Programas sociales que han venido desarrollando en Venezuela desde la llegada del gobierno Bolivariano primero con Chávez y luego con Maduro y que molesta a la ultra derecha reaccionaria y vandálica que hoy sume a la patria de Bolívar en violencia y muerte y que los grupos que controlan la información a nivel nacional y mundial se lo atribuyen al Gobierno y al pueblo organizado, patriota, para crear repudio y odia en la población venezolana y en el exterior.
Venezuela dejó de ser un paraíso porque:
1) Tenemos una ultraderecha que no tiene conciencia histórica y no ama a su patria.
2) Porque estamos sufriendo la máxima vergüenza por la conducta irracional de la MUD al usar excrementos humanos en sus manifestaciones de locura.
3) Estamos sufriendo el supremo dolor al ver como destruyen los bienes de la nación.
4) Estamos tristes por las muertes que ocasiona la dirigencia opositora (MUD)
5) Estamos desconsolados por tanta gente fallecida víctimas de la irracionalidad de la oposición venezolana.
6) Embargados de horror al ser testigos de una ansia de poder desmedida, de locura. Podrían estar sumados a la construcción de una sociedad de justicia social y no ser exterminadores de vidas humanas.
7) Estamos sufriendo porque gobiernos que tienen muchos problemas que resolver: discriminación, pobreza, violencia, corrupción, represión se permiten aliarse con los violentos que matan y desafían la paz en Venezuela.
Venezuela vivía en paz , el pueblo venezolano ha vivido en paz desde que llegó Chávez y se dio inicio al proyecto de país bolivariano conocido como la Revolución Bolivariana. Actualmente Venezuela es atacada por la derecha criolla, por la ultra derecha de los países que alimentan el terrorismo, la injerencia foránea, el fascismo contra la Patria y aspiran volver a «los negocios» con los gobiernos de derecha para la expoliación de los recursos del país y reducir a la exclusión el pueblo trabajador, el pueblo patriota . Por esto se manipula la información, se usan las «redes sociales» para difamar, crear matrices de opinión en contra de Venezuela, mentir, fabricar falsos positivos informáticos y detrás de todo esto está la mano del imperialismo del norte .
Yury Weky Silva
Autora de:
-La Revolución es un Camino sin tregua.
-Por los caminos.
-Caminos de Revolución.
Coautora de: -El socialismo en el siglo XXI.
Pedro, el insustituible
Golpeando el Yunque 