Ésta criminal, culpable de decenas de asesinatos, no debe quedar impune
El 11 de noviembre del 2019, el entonces presidente de Bolivia, Evo Morales, fue expulsado violentamente del poder por la cúpula político-militar-religioso, antes de concluir su mandato constitucional, bajo el argumento de “fraude electoral”, atizado por la misma Organización de los Estados Americanos (OEA).
Un año después del desastroso y sangriento desgobierno del régimen usurpador encabezado por Jeanine Áñez (actualmente presa), los pueblos de Bolivia lograron revertir el Golpe de Estado en las urnas, y colocaron nuevamente al Movimiento Al Socialismo (MAS) en el poder.
Casi dos años después de aquel estremecedor Golpe de Estado truculento, la justicia boliviana somete a juicio oral y público a Jeanine Áñez y a los exaltos mandos militares y policiales por incumplimiento de deberes.
En 45 días comenzará el acto público del juicio oral. La pena máxima que persigue el Ministerio Público, en este caso, es de 10 años de cárcel. Existen otros casos penales contra éstos y otros sindicados.
El 28 de junio de 2009, el entonces presidente de Honduras, Manuel Zelaya, del Partido Liberal, fue expulsado violentamente del poder por la cúpula político-militar-religiosa, antes de concluir su mandato, solo por atreverse a consultar al pueblo sobre una posible Asamblea Constituyente.
¿Llevará Honduras a juicio penal a sus verdugos? Seguir leyendo en…
Tomado de RE-EVOLUCIÓN.